80 AÑOS DEL MENSAJE DE DIOS PADRE A LA HUMANIDAD

 Hola amigos de lo profetico, hoy recordamos la Fiesta de Dios Padre Eterno de la Humanidad, que fue revelado a su "plantita", hace 80 años atràs, el 1 de julio de 1932:

"Què un dìa, o por lo menos un domingo, sea consagrado para glorificarme de modo muy particular bajo el nombre de PADRE DE TODA LA HUMANIDAD".
"Sì preferìs rendirme este culto especial, YO escojo el primer domingo de Agosto, si tomáis un día de la semana prefiero que sea el 7 de ese mismo mes".

Veamos la posición oficial de la Iglesia Catolica, despues de 10 años de investigación canónica, que respalda el Mensaje del Padre como autentico, el caul fue confiado a la Madre Eugenia Ravassio, una sencilla monja, que vivio el mensaje del Padre.

La misión de Madre Eugenia Ravassio (Beata actualmente)

La misión que se le confió a Madre Eugenia fue clara y desde el punto de vista doctrinal me parece legítima y oportuna. Misión exacta: Hacer conocer y honrar a Dios Padre, sobre todo instituir una fiesta especial pedida a la Iglesia en Su nombre. La investigación ha encontrado que la fiesta en honor del Padre se insertaría en todo el culto católico, conforme al movimiento tradicional de la oración católica, que es una Ascención hacia el Padre, mediante el Hijo, en el Espíritu, como lo prueban las oraciones de la misa y la oblación litúrgica del Padre en el Santo Sacrificio. Además es extraño que aun no exista ninguna fiesta especial en honor del Padre: la Trinidad es adorada como tal, el Verbo y el Espíritu Santo son adorados en su misión y en sus manifestaciones exteriores, solo el Padre no tiene una fiesta propia que llamaría la atención del pueblo cristiano sobre su persona. Como arrojó una encuesta que se realizó entre numerosos fieles de diferentes estratos sociales y hasta entre sacerdotes y religiosos, el hecho de la ausencia de una fiesta litúrgica en Su honor se atribuye a que “el Padre no es conocido, no se le reza, no se piensa en El”. Quien dirigió la encuesta descubre también, con sobresalto que un gran número de cristianos se alejan del Padre porque ven en El un juez terrible; prefieren dirigirse a la humanidad de Cristo ¡y cuántos se dirigen a Jesús para ser librados de la cólera del Padre!


Una fiesta especial tendría como primer efecto restablecer el orden en la piedad de muchos cristianos y volverles a conducir al encargo del Salvador: “Todo lo que pedirán al Padre en mi nombre”….. además “Oren así: Padre Nuestro que….”.

Al mismo tiempo una fiesta litúrgica en honor del Padre los ayudaría a dirigir sus miradas a Aquel que el apóstol San Giacomo (Joaquín) llamaba “el Padre de Luz”, del cual proceden todos los dones. Acostumbraría a las almas a tomar en cuenta la Bondad Divina, los beneficios de Dios, su providencia paterna y que esa Providencia es la de Dios Trino, común a las tres Personas y que Dios expande sobre el mundo los tesoros inefables de su Misericordia infinita.

Parecería, a primera vista, que no haya ninguna razón especial para honrar al Padre en particular, ¿pero no ha sido el Padre que ha mandado a Su Hijo al mundo? Si es sumamente justo darle culto al Hijo y al Espíritu Santo por sus manifestaciones exteriores ¿no sería justo, y obligatorio darle gracias a Dios Padre, como lo motivan los prefacios de la Misa, por el regalo que nos hizo de su Hijo?

El objeto de esta fiesta especial se delinea de forma clara: honrar al Padre, agradecerle, alabarlo por habernos dado a Su Hijo; en una palabra como dice el mensaje: Honorarlo, agradecerle y alabarlo como autor de la Redención.

Darle gracias a Aquel que ha amado tanto al mundo como para dar a Su Hijo único, para que todos los hombres, reunidos en el cuerpo místico de Cristo, en este Hijo, se hagan también hijos en El. En el momento en el cual el mundo, turbado por las doctrinas del laicismo, del ateísmo y de las modernas filosofías no conoce mas a Dios, el verdadero Dios, ¿No haría esta fiesta conocer a muchos el Padre que vive y que Jesús ha revelado, el Padre de misericordia y de bondad?
¿No contribuiría a hacer crecer el número de adoradores del Padre, en espíritu y en verdad, que Jesús ha anunciado?

En el momento en que el mundo, abatido por las guerras homicidas va experimentando la necesidad de un principio sólido de unión para el acercamiento de los pueblos esta fiesta aportaría una gran luz. Enseñando a los hombres que ellos en el cielo tienen al mismo Padre. Aquel que les ha regalado a Jesús hacia el cual los atrae para formar el mismo cuerpo místico, en la unidad del mismo Espíritu de amor.

En el momento en que tantas almas, agotadas y cansadas por las pruebas de las guerras podrían añorar avocarse a una vida interior profunda, ¿No sería esta fiesta capaz de «moverlas desde adentro» para adorar al Padre que está en lo secreto y para ofrecerse en una oblación filial y generosa al Padre, fuente única de la Trinidad en ellos?

¿Tal fiesta no conservaría el hermoso movimiento de vida sobrenatural que arrastra a los hombres hacia la infancia espiritual y hacia la vida filial con el Padre mediante la confianza, el abandono a la Voluntad Divina y el espíritu de fe?
Por otra parte, cualquiera que sea la decisión de la Iglesia respecto a esta fiesta hay un problema de doctrina que surge. Ilustres teólogos piensan que la doctrina de las relaciones del alma con la Trinidad tiene que profundizarse y que ella podría ser para las almas, una fuente de luz sobre la vida entre el Padre y el Hijo, de la que habla San Juan y sobre la participación de la vida de Jesús, hijo del Padre, y especialmente a su amor filial por El.

Cualquier cosa que suceda con estos problemas teológicos, lo que quiero aquí recalcar es esta: una pobre ignorante de teología dice que tiene comunicaciones divinas que podrían tener riqueza doctrinal.. Las construcciones imaginarias de una visionaria, son pobres, estériles, incoherentes. Por el contrario el mensaje de Dios Padre que dice la Madre Eugenia haber recibido es fecundo marcado por el cruze armoniosa de dos elementos que lo vuelven seguro: por una parte encaja en la tradición de la Iglesia, carece de un aspecto nuevo que lo pueda hacer verse sospechoso porque declara que ha sido ya dicho todo mediante la revelación por Cristo de su Padre y que todo está en el Evangelio. Por otra parte pone en claro que esta Verdad, sobre el conocimiento del Padre necesita volverse a pensar, profundizarla y vivirla.


La falta de proporción entre la debilidad del instrumento - incapaz de descubrir una doctrina de esta naturaleza - y la profundidad del mensaje que la religiosa transmite ¿No permite entre ver que otra causa superior, sobrenatural y divina haya intervenido para encargarle este mensaje?

Yo no veo cómo humanamente pueda explicarse este descubrimiento por parte de la monja, de una idea de la cual los teólogos inquisidores le respondieron que las apariciones de Dios Padre eran en si mismas imposibles y que nunca se habían verificado en la historia. A eso la monja replicó: “El Padre me dijo que escribiera lo que yo veía”. El pide a sus hijos teólogos buscar. La monja nunca cambió nada de sus explicaciones, defendió sus afirmaciones por largos meses. Solo en enero de 1934, fueron los mismos teólogos que descubrieron en los escritos del mismo Santo Tomás de Aquino, la respuesta a las objeciones que ellos mismos ponían.

La respuesta del grande doctor de la Iglesia sobre la distinción entre aparición y misión los iluminó. Ella superó la parálisis que había caído sobre la investigación. Contra los sabios teólogos, la pequeña ignorante había tenido razón. ¿Como explicar humanamente, también en este caso, la luz, la sabiduría y la perseverancia de la monja?

Una falsa vidente habría tratado de adaptar su versión a los puntos de los teólogos. La monja resistió, he aquí las nuevas razones por las cuales su testimonio nos parece digno de sostenerse con confianza, de cualquier forma lo que me parece digno notar es esa actitud de haber asumido algo maravilloso.

Mientras las falsas místicas hacen pasar en primer lugar, mejor, no ven que las cosas extraordinarias, estas son, en el caso de la monja, puestas en el segundo lugar, a titulo de pruebas y de medios. Hay una ausencia de exaltación, un equilibrio de valores que dan buena impresión.

De la investigación de los teólogos diré solo pocas cosas. Los reverendos padres Augusto y Alberto Valencin son estimados por su autoridad filosófica y teológica así como su conocimiento en el campo de la vida espiritual. Ya en otras circunstancias ellos han tenido que intervenir en hechos similares por ellos estudiados. Sabíamos que lo habían hecho con mucha prudencia, esas fueron las razones por las cuales los designamos. Reconocemos que su colaboración fue dedicada y a conciencia. Su testimonio a favor de la monja y su reconocimiento sobre una intervención sobrenatural de los hechos en su conjunto tiene mas valor ya que por mucho tiempo estuvieron hostiles y escépticos. Se convencieron poco a poco después de haber quitado una por una cada objeción y despuésde haber impuesto a la monja a duras pruebas.

Conclusiones
Según mi alma y mi conciencia con un verdadero sentido de mi responsabilidad frente a la Iglesia, declaro que un hecho sobrenatural y divino es lo único que es capaz de dar una explicación lógica y satisfactoria al conjunto de los hechos.

Privado de todo lo que lo circunda este hecho esencial me parece lleno de nobleza, de elevación y de fecundidad sobrenatural. Una humilde religiosa ha llamado a las almas al verdadero culto, el del Padre, tal como Jesús lo enseñó y como la Iglesia lo ha incluido en la liturgia. No existe en hecho nada alarmante solo algo muy sencillo y conforme a la doctrina.

Los hechos maravillosos que acompañan este mensaje podrían desasociarse de aquel acontecimiento central y aun así este conservaría todo su valor. La Iglesia dirá si la idea de la Fiesta especial puede ser acogida mas allá del hecho particular vinculado a la monja y por razones doctrinales.

Creo que la gran prueba de la autenticidad de la misión de la monja se nos da por la forma en la que ella aplica a la vida real esa bella doctrina que ella nos ha venido a recordar. Retengo conveniente dejar continuar su obra. Creo que allí esta el dedo de Dios y después de diez años de investigación, de reflexión y de oración bendigo al Padre por haberse dignado escoger mi diócesis como lugar de una manifestación tan conmovedora de su Amor.
† ALEXANDRE CAILLOTObispo de Grenoble
en el tiempo en el que fue revelado el mensaje

Comentarios

  1. Se acerca la fiesta grandiosa a nuestro DIOS PADRE esperamos que muchos la pidan en nuestras parroquias agradeciendole todo su amor ..... este año es el 7 DE AGOSTO SE UNE EL 1 DOMINGO Y EL 7 ES TIEMPO DE PREPARARNOS

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  2. Se acerca la fiesta grandiosa a nuestro DIOS PADRE esperamos que muchos la pidan en nuestras parroquias agradeciendole todo su amor ..... este año es el 7 DE AGOSTO SE UNE EL 1 DOMINGO Y EL 7 ES TIEMPO DE PREPARARNOS

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  3. CELEBREMOS ESTA FIESTA COMO EL PADRE LO PIDE CON MISA SOLEMNE ESTE AÑO BENDECIDOS.LA CAPILLA A LA CUAL YO PERTENEZCO LLEVA EL NOMBRE "DIOS PADRE" Y SOMOS MUY BENDECIDOS POR EL Y CADA AÑO REALIZAMOS SU NOVENA, HAY QUE HACER LO QUE DICE EL PADRE DESEO SER:"CONOCIDO, ALABADO Y HONRADO POR TODOS LOS HOMBRES"

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